La sala está construida bajo la modalidad de cámara ignífuga tipo A, definida por la Euronorma EN-1047/2 como “cámara dentro de cámara”.

En este caso, la cámara está separada del ambiente con riesgo de incendio por una pared de bloques de hormigón de 0.40 m. de espesor, con una puerta de seguridad ignífuga (resistente a sopletes oxiacetilénicos) de 0.20 m. de espesor.

Dentro de esta, envuelta en una cámara de aire de 500 m.3, se encuentra la sala-cofre, construida con una pared doble de chapa galvanizada con relleno interno de lana de roca. Esto actúa como doble jaula de Faraday y doble barrera de vapor y humedad, lo que permite mantener las condiciones ambientales sin alteraciones en caso de siniestro.

Es conocido, que en casos de siniestros, entran en conflicto los aspectos de seguridad patrimonial y de seguridad e higiene ocupacional. En nuestro caso, se armonizaron ambos y podemos afirmar que se cumplen tanto las disposiciones del Banco Central respecto a los recintos de seguridad, como las de la Euronorma 1047-2 respecto de la protección de los archivos magnéticos y/u ópticos en caso de incendio y la Ley 19587 y su Decreto Reglamentario 351/79 en cuanto a la seguridad de las personas.

Estas características fueron certificadas, luego de concluida la auditoría de condiciones constructivas y del correspondiente ensayo de materiales, por el Laboratorio de Ensayo de Materiales de la Escuela Superior Técnica del Ejército Argentino.